“Comunicaciones omnicanal en todas las etapas del ciclo de vida del cliente” significa un número exponencial de interacciones. Y cuando se dan en un sector hiperregulado como el asegurador, trabajar con un partner que garantice el cumplimiento normativo es fundamental. Una de las claves para conseguirlo, y para prevenir dificultades, es la certificación.

En Grupo MailComms llevamos 3 décadas ayudando a las empresas a comunicarse con sus clientes. En este tiempo nos hemos centrado en algunos sectores, y el asegurador es, quizás, en el que más fuerte nos hemos posicionado. ¿Esto de qué manera se mide? Podría ser por proyectos puestos en marcha, por facturación, por número de clientes… O podría establecerse en base al criterio que más nos gusta a nosotros: por el grado de expertise que hemos alcanzado (y seguimos, esta es una carrera de fondo). Para nosotros especializarnos es, entre otras cosas, ofrecer servicios potentes que se adaptan a la realidad de los procesos de nuestros clientes, conocer perfectamente la normativa que les afecta y diseñar tecnología que aporte funcionalidad y tranquilidad legal a las empresas. Hoy queremos hablaros de las comunicaciones certificadas en el mundo del seguro.

En una sociedad tan intensamente digitalizada como en la que vivimos, pero con un porcentaje no desdeñable de personas que no se siente a gusto en lo electrónico, la omnicanalidad es la clave para generar puntos de contacto eficientes con los usuarios en general y los asegurados en particular. Es decir, no hay mejor manera de gestionar la conversación con clientes, empleado y proveedores que a través de una estrategia 360º que integre todos los canales (físicos y digitales) y todos los dispositivos en cualquier etapa del ciclo de vida del destinatario.

Un universo de comunicaciones para certificar

Dada esta realidad, la tipología de interacciones no es infinita, pero sí enormemente alta. Y para añadir complejidad, la normativa evoluciona cada día más hacia la protección del usuario. Dos claros ejemplos transversales son el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) y el reglamento 910/2014 (eIDAS) relativo a la identificación electrónica y los servicios de confianza para las transacciones electrónicas, el cual, próximamente evolucionará con la llegada de eIDAS 2 . A estas dos, al sector asegurador se unen otras normativas específicas como la directiva IDD, la Ley 50/1980 de Contrato de Seguro o la Ley 22/2007 sobre comercialización a distancia de servicios financieros, por citar solo algunas.

Un punto clave para trabajar en garantía de cumplimiento en esta maraña legislativa y de comunicaciones con clientes es la certificación segura y confiable de dichas comunicaciones. En Grupo MailComms creemos en la máxima “el cliente en el centro, siempre informado”. Ese “siempre” se puede descomponer en las fases de su ciclo de vida. Y en cada una de las etapas se dan comunicaciones específicas en las que entran en juego conceptos como: consentimiento, publicidad, test de conveniencia, test de idoneidad, contratos, pólizas, welcome pack, facturas, documentos IPID / IDD, partes, notificaciones, gestión de impagados, fidelización, renovación… Son muchos y no los hemos nombrado todos. Pero todos ellos tienen una cosa en común, es obligatorio que cumplan con toda la normativa vigente y, por tanto, las empresas tienen que ser capaces de demostrar, a veces incluso en sede judicial, que han respetado todo lo que las diferentes legislaciones establecen en su relación con sus usuarios.

Ecosistema de aplicaciones para el cumplimiento normativo

Una de las principales fortalezas de nuestro ecosistema de aplicaciones, diseñadas bajo la filosofía compliance-by-design, es su capacidad para certificar todas las interacciones que obligue la normativa o que aconseje la jurisprudencia y la experiencia. Nuestras herramientas recogen evidencias relacionadas con la identidad del destinatario o de la empresa que envía, el contenido remitido, los sellos de tiempo, la recepción, la firma… Y custodian estas evidencias durante al menos 5 años en entornos securizados. Esto se traduce en fehaciencia legal. Además, su valor probatorio se extrema gracias a nuestra condición de prestador cualificado de servicios electrónicos de confianza, como ha acreditado el Ministerio de Transformación Digital y Función Pública.

Este cóctel ofrece a las empresas una oportunidad para la gestión integral y en cumplimiento de comunicaciones con clientes, empleados y proveedores (incluso desde antes de que lo sean), siempre sin olvidar vertientes necesarias también hoy en día como la experiencia de cliente, la seguridad y privacidad de la información, la eficiencia y el ahorro de costes, entre otros aspectos. A través de nuestras aplicaciones te acompañamos en momentos como:

  • Fase de descubrimiento: obtención de consentimientos RGPD y su gestión, planificación, asesoramiento, cotización, seguimiento…
  • Consideración y compra: Contratación, seguimiento hasta firma, suplementos…
  • Retención y recomendación: siniestros, recibos, cancelación…

Y con ellas avanzamos contigo en todo el marco asegurador que comprende comunicaciones (offline y online) de marketing, transaccionales y legales, omnicanal, con servicios documentales asociados y, como ya hemos dicho, siempre en cumplimiento de la regulación aplicable al sector.

También somos especialistas en personalización. Y esto incluye las comunicaciones a clientes, proveedores y empleados. ¿Quieres saber cómo poner en marcha un universo de comunicaciones certificadas entre tu compañía y sus usuarios? Si te parece bien, déjanos tus datos en el formulario que encontrarás a continuación . Estaremos encantados de concertar una reunión contigo para conocer tus necesidades.