La cuestión más controvertida, según este abogado y también para los expertos de MailTecK, es el “interés legítimo”. A través de éste que se excluye el consentimiento del cliente para el uso de sus datos personales en la oferta de productos y servicios de la propia compañía, que sean similares a los que inicialmente fueron objeto de contratación. Embid subrayó la dificultad de determinar la similitud y precisó que el interés legítimo no engloba el envío de publicidad o de propuestas comerciales de empresas del mismo grupo.
Javier Echevarría, CEO de Mailteck & Customer Comms, indicó que la Agencia de Protección de Datos entiende que el envío de comunicaciones comerciales puede ampararse en el interés legítimo cuando se produce por medios no electrónicos, el interesado es cliente de la entidad en el momento del envío y los productos y servicios ofrecidos son propios de ésta y similares a los que previamente contrató el usuario. En cualquier caso, precisó que “el interés legítimo hay que comunicarlo al cliente”.
Echevarría, junto a Moisés Fimat, consultor senior, y Francisco Marina, consultor preventa, llevaron a cabo una demostración de MailConsent, tecnología que permite gestionar de manera práctica el ciclo completo del consentimiento a través de comunicaciones multicanal. Esta plataforma facilita la obtención del consentimiento de los clientes y el ejercicio de los derechos de acceso para el uso de sus datos personales, así como la comunicación de una violación de seguridad (Data Breach), lo que permite cumplir con el reglamento “de una forma rápida y sencilla”.
Para concluir, Echevarría lanzó un mensaje de tranquilidad sobre el reglamento: “Faltan dos meses, todavía hay tiempo para estar perfectamente preparados”.
Redacción BDS. INESE. 15-02-18 “Bds especial Semana del Seguro 2018 – jueves 15 de febrero”